28.11.08

Michifuz

Muchos sabrán que enloquezco por Hello Kitty. Me encanta esa gata del mal! Tengo miles de cositas de ella en casa y algunas pululando por acá en la oficina.

Estaba el otro día navegando -en plan H- por Google, buscando fotos de tatuajes de la dichosa gata y me encontré con la imagen más tierna del mundo... Realmente la cosa más adorable que en mi vida había visto (en realidad, he visto muchas cositas adorables...). Les dejo la foto para que ustedes mismos digan "Ooooohhhh..." con voz de quinceañerita, al menos a mí (aún) me sale esa voz...


Imágen: http://profile.myspace.com/index.cfm?fuseaction=user.viewprofile&friendID=23337410

17.11.08

Sesetitrés horas y una reconciliación


Fue un fin de semana tan pesado. Sentía las horas encima de mí y cada segundo parecía una eternidad. Busqué salir de casa, ver gente y mantener mi mente ocupada, aunque sea por unos minutos, para no pensar. Claro, esto resultaba un poco en vano, porque, lo que había pasado, estaba incrustado en cada célula de mi cuerpecito y eso me hacía pensarlo aun más. Además, el hecho de saber que estaba a varios cientos de kilómetros lejos de mí, me hacía casi enloquecer.

El viernes salí con mis amigos por la noche. El sábado almorcé con ellos y luego fui a casa de Chiara; nos fuimos por un pastel a San Antonio, tratando de evitar las avenidas grandes porque, según ella, podía haber "batidas" y la muy lorna todavía no saca su brevete. Ayer domingo tuve un almuerzo con mi papá y mi hermano, y terminamos almorzando en un chifa. La verdad, no se me antojaba nada... el nudo que se había apoderado de mi garganta -y de todo mi tracto estomacal- me impedía tener un buen antojo y atragantarme un Combinado o un rico Chi Jau Kay.

Las horas fueron pasando lentamente ayer domingo y, cuando eran casi las siete de la noche, recibí una llamada: era la personita a la cual le había fallado un par de días atrás. Quedamos en conversar ayer mismo y, como por arte de magia, mi instinto femenino hizo que me sintiera más tranquila que nunca en este fin de semana de horror y empecé a sentir que realmente todo se iba a arreglar en un par de horas.

Llegué a casa, me di un duchazo, me cambié de ropa y me eché esa colonia de vainilla que a él tanto le gusta. Lo esperé y, como lo habíamos pactado, a las 11 de la noche abrió la puerta. Yo salí a recibirlo y me dio el más tierno abrazo, un abrazo por el que había esperado exactamente –y sin mentir- 63 horas. Pasado los minutos, y luego de arreglar las cosas, me dio un beso que hizo estremecer cada una de aquellas células que lo habían pensado, extrañado y llorado durante ese cúmulo de horas, que más bien parecían un millón...

Qué cosa para más increíble es la sensación de la reconciliación y todo lo que puede abarcar. Me sentí tan bien de saber que esto que sentimos es más fuerte que cualquier cosa y una vez más comprobé que, así él no sea una melcocha humana, de una u otra manera me hace sentir –y entender- todo lo que siente por mí. Hoy me siento feliz como siempre lo soy con él, tan contenta que solo reía cuando me llamó por teléfono hace unos momentos. No me preguntes por qué. Tú lo sabes.

Bienvenido de vuelta a casa, Chinito.

6.11.08

Y se nos fue (en Jet)...


Noviembre. El año chapó su Jet y voló. Realmente han pasado los meses de una manera rápida y desmesurada. De pronto vi mi calendario y me asombré de la fecha: 06.11.08.

Estoy tratando de hacer un balance personal de lo positivo y negativo de este año en este momento, y revolviendo en mi memoria pude encontrar más cosas buenas que malas -no quiero llamarlas "malas", pero lo hago para no repetir la palabra "negativo"-.

A principios de año recuerdo haber escrito un post sobre el Año de la Rata -mi "animalito"- y me pareció que, tal vez, el Horóscopo Chino tendría razón: este sería un gran año. Las primeras semanas del 2008 no fueron las mejores por cuestiones que ya no vale la pena mencionar. Sin embargo, no todo fue color de hormiga -como diría mi mamá-, sino que empezaron a pasar varias cosas que me hicieron pensar que, efectivamente, este año tendría (un lindo) sentido.

Acabé mi carrera; me mudé sola a un lugar que me encanta, así muchas veces ande desastrosamente desordenado; encontré mi primer trabajo como periodista; cambié algunas manías mías, de hecho para bien y me siento feliz de haberlas podido mejorar; dejé de fumar (el SÚPER logro del año); bajé de peso sin agonías; seré tía nuevamente; y (la más positiva de las positivas, por eso la dejo para el final) encontré a una persona maravillosa que me hace tremendamente feliz. Y esto es solo para mencionar algunas...

Como dije un par de párrafos más arriba, las negativas quiero que sean "no mencionables" para mí. En realidad no son muchas, pero a cualquiera le pasa que lo feo de su vida quiere dejarlo de lado. Incluso, -y está científicamente comprobado- como mecanismo de defensa, el propio ser humano es capaz de borrar las malas experiencias de su memoria... Supongo que para evitar el sufrimiento a largo plazo... Personalmente, pienso que no es lo peor recordar este tipo de cosas, al contrario, creo que hacen que uno se vuelva más fuerte y sin ganas de "comer del mismo menú".

En fin... Aún no se nos ha ido el 2008, nos quedan poco menos de dos mesesitos y miles de cosillas -positivas y negativas- pueden pasar (cosas de último momento, como para no perder la costumbre...). Por lo pronto yo ya le escribí mi cartita a Papá Noel... (y aprovecho para decirte, mi estimado panzoncito -porque sé que me lees- que más te vale no olvidar lo más importante de esa lista, eh??? El punto Nº5... Je, je, je...).


Noviembre.